«La ayuda psicológica hoy es más necesaria y demandada que nunca»
Rosa María Martínez González (Macael) es una estudiante de psicología que este año se gradúa con pocas esperanzas laborales; pese a ello, adora su profesión y está dispuesta a lograr sus objetivos laborales (si puede ser en la comarca del Almanzora conde vive). ?¿Que planes tienes en mente para el año próximo?
Ideal.es
Martes, 10 de mayo 2016, 07:05
?Me gustaría seguir mi formación porque no veo ahora mismo muchas posibilidades laborales. ?¿En tiempos de crisis como el actual es necesaria tu profesión? ?Siempre hace falta ayuda o orientación psicológica, pero en estos momentos de incertidumbre laboral, paro, familias desestructuradas, impotencia...creo que resulta imprescindible ayudar a las personas a saber afrontar esas situaciones tan complicadas. ?¿Te encuentras preparada para cumplir esta labor? ?He estudiado mucho, me he formado y adoro mi profesión, sien embargo la experiencia resulta básica en esta y otras profesiones, de modo que me encuentro segura de mi misma, aunque evidentemente me queda mucho camino todavía. ?¿Cómo imaginas tu vida en pocos años? ?Me encantaría tener mi propia clínica en alguno de los pueblos de la comarca del Almanzora, o en Macael, que es donde vivo (bueno o en Serón donde vive mi novio); por ejemplo. ?¿Tienes alguna preferencia laboral de cara al futuro? ?Me gusta mucho la psicología clínica, pero no descarto nada, incluso oposiciones. En este punto considero que beberían convocarse más plazas en esta profesión, porque, desde mi punto de vista, en la seguridad social se cuenta con pocos psicólogos en relación con las necesidades actuales y la gran demanda del momento. ?¿Descartas salir fuera de España a buscar trabajo? ?No lo descarto; de hecho mi padre trabaja fuera del país. Por ahora prefiero quedarme; tengo aquí al resto de mi familia, mi pareja (que trabaja en Cosentino) y mis amigos. De todas formas si la situación laborar no mejora en un tiempo; no yo, sino muchos jóvenes trendremos que marcharnos a nuestro pesar. Estamos preparados, formados, pero sin futuro por ahora. A nuestra generación le ha tocado una etapa difícil, pero todavía conservamos ciertas esperanzas.
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