El bebé, boca arriba y sin peluches

Los pediatras establecen una serie de consejos para evitar el riesgo de muerte súbita en los bebés, uno de esos síndromes que produce extrema preocupación en los progenitores, especialmente en el primer medio año de vida. Entre lo básico que establecen está que el colchón sea firme, que esté en en un espacio oreado, que el bebé esté colocado boca arriba y que no permanezca dormido entre juguetes o peluches, ante el peligro de asfixia.

La muerte súbita es una gran desconocida, que curiosamente ocurre en países desarrollados. La temperatura de la habitación, la posición del niño o que se fume alrededor son algunas de las causas que pueden llevar a esta dramática incidencia. En Europa se producen 2.400 muertes al año por la muere súbita. Con el objetivo de minimizar los factores que la pueden desencadenar, los institutos Aitex de Alcoy, el de Biomecánica de Valencia y el Europe del Sueño han lanzado en las farmacias un producto, BabyKeeper, que rebaja las posibilidades de fallecimiento en un 72 %, según publicaba esta semana La Verdad. Según sus creadores, evacua de una forma eficaz el CO2 que el bebé genera a su alrededor, así como el calor residual. De la misma manera, evita componentes de toxicidad en el ambiente. "No requiere el uso de sábanas, que podrían provocar asfixia, es resistente a los flujos del bebé y reduce la reinhalación de CO2 gracias a su estructura de membrana interna", subrayan sus responsables. "Cuantas menos cosas haya alrededor de ese momento tan vulnerable que es el sueño, mucho mejor y más seguro", señala Tomás Zamora, director del departamento de Innovación del ESCI. El BabyKeeper se pondrá a la venta en farmacias.