Fiscalía archiva la denuncia de los ecologistas por el incendio de la planta de Geocycle en Albox

Así lo han confirmado fuentes del colectivo, que instaba a que se investigaran las causas así como las prácticas de la empresa "antes y después" de que se produjera el fuego. Y es que, según los datos que manejaban, la capacidad de la planta "se había superado hace tiempo" y en los últimos años "se han producido más de 60 conatos de incendio que han sido extinguidos por los propios trabajadores".

El grupo conservacionista apuntaba que los vecinos de Albox tuvieron que soportar "fuertes olores y picores de garganta" debido a los "productos quemados" en el incendio, de modo que llegó a solicitar a la Delegación de Medio Ambiente que confirmara si hubo casos de vecinos que asistieran a los servicios sanitarios con este tipo de problemas, extremo finalmente que se descartó.

Otro de los aspectos que preocupaban a la organización fue que las mediciones en los que se basó la Delegación de Medio Ambiente para negar la toxicidad de la nube estuvieran "mal hechas en cuanto a metodología e instrumental utilizado". En este mismo sentido, señalaron la posibilidad de que las lluvias acaecidas posteriormente trasladaran el problema atmosférico al suelo y flora locales.

No obstante, cabe recordar que la comisión local de información y seguimiento del accidente, que estuvo también integrada por ecologistas, encargó un informe sobre el estado de los suelos afectados que, tras la intervención, descartó la presencia de contaminación en el suelo de manera que el área estudiada --el emplazamiento de la planta y sus alrededores en el paraje de la Terdiguera-- se halló conforme a la legislación vigente.